La traza es un estado de la masa del jabón
Fíjate tú que tontería la traza. Se denomina así al momento en el cual la masa mezclada del jabón deja una traza o surco por donde pasa la pala o cuchara con la que removemos.
Es un momento en el cual una parte del aceite está ya saponificado y sirve como emulsionador del resto de la mezcla. Es en ese estado cuando debemos añadir ciertos ingredientes que, ya sea por su sensibilidad o por su tendencia a la separación, no se deben añadir antes.
El orden de los ingredientes es importante
En la traza se suelen poner los aceites esenciales. Hay que tener en cuenta que determinados esenciales aceleran la traza con lo que el jabón se puede volver demasiado espeso.
Cuando el jabón está 'trazado' ya sabemos que lo podemos verter en los moldes sin miedo a la separación de los ingredientes.
Hay veces, sobre todo debido a la temperatura pero también con determinados ingredientes, que la traza ocurre en un plis. De tener el jabón líquido se pasa a tener una pasta impracticable. Esto obviamente dificulta muchísimo el moldeado y perjudica el aspecto final del jabón.
Existe también un concepto denominado falsa traza que consiste en un estado de apariencia similar a una traza tan ligera que acaba separándose. En ese caso hay que volver a mezclar para que vuelva a emulsionar la masa antes de verter en el molde.