Se empieza haciendo una pieza de cada color. Se corta en rebanadas y se unen.
Para que no exista la posibilidad de que se despeguen, lo que hago es humedecer bien las caras a unir, las meto en el molde para que no se muevan y les coloco un peso encima hasta que estén secas. Luego se cortan las piezas, se colocan en el molde y se rellena el hueco con el color de fondo.
Lo que me gusta de esta historia es que el jabón cambia con el uso ya que cuando se gastan los colores que están al principio aparecen los siguientes.
Son algo laboriosos de hacer pero a mí me compensa ya que me lo paso genial.
Quedan otros dos, haré las fotos y los subiré y ahí acabará la serie.
Hasta entonces compañer@s.
