Mi jabón era uno que jamás había hecho, un 100%coco al 0 de engrasado y con potasa al 35% de concentración, atrevida que es una.
Mi propósito con ese jabón es tener provisión para muchísimo tiempo de antimanchas rápido, por su gran poder de limpieza del coco, para que el restregar sólo me tome unos segundos y a la lavadora.
hize el calculo de la potasa que es del 90% de pureza y le agregué la necesaria para completar al 100, todo muy bien disuelto, y el coco fundido, cuando la lejía ya se percibía transparante, mezclé lejía y coco que ya llevaba rato apagado y había fundido al mínimo...Bien pues en sólo segundos apareció un cuscús...batí un poco y la traza no se veía, y comprendí enseguida que debió ser por no dejara enfriar un poco más las dos mezclas y que cuando se juntaron subió más la temperatura, la saponificación casi se producía de forma instantanea por contacto...
Así que no sabía si encender el fuego o dejar en friar y entonces volverlo todo a calentar...
Así que mientras dudaba me puse a escuchar chistes por internet, que me hicieron estar feliz y relajada, en esa breve pausa vuelvo y me encuentro el jabón flotando...¡y no había hecho un lavado de sal! Más dudas que me entraron, pensé, aquí no flota todo mi jabón, y no estoy dispuesta a perder nada de él, no me importaba perder la glicerina, pues su misión principal sería la ropa, aunque ya tenía en una jarrita algo de leche de cabra y miel en polvo preparado para una parte de la masa y experimentar...
Decidí romper ese supuesto jabón flotante y meclarlo con el resto del agua, y seguro que aceite y potasa aún sin mezclarse, como la olla se apreciaba muy caliente y el mótivo del corte, no pudo ser exceso de batido porque apenás batí, decidí no poner el fuego y mover y mover a mano, pero me fue mejor el brazo de la batidora cogido con las dos manos y dale que dale, apagado, y así fue como se fue arreglando y formando un espeso pure de patatas que daba un gozo tremendo de vez, todo homogeneo, y aún seguía viendo agua al fondo así que moví hasta que la masa se la bebió toda, y ya seguí con mis mezclas...y enmoldé tremendamente feliz y agotada.
En este momento está en estado aún como de gelificación, pues anoche cuando lo dejé estaba más duro que ahora, si me acuerdo en unos días pongo una foto del feliz resultado.
P.D. Estoy segura que también influyó al subidón de temperatura de le mezcla, además de que fuese coco, estuviese todo templado-caliente, la cantidad pues eran 2500 gr de coco y además con concentración tirando a alta, 35%. Ya se que pensareis que derroche de coco para lavar, pero confio que este jabón no se enranciará nunca, y quizás me dure años, sólo va a ser para prelavado manual...salvo una pequeña parte que aparté y añadí sobre engrasado a ojo de ricino y jojoba y achiote...
Además tenía un cubo de 9kg de Gisela que me salió a muy buen precio y había que empezar a darle buen uso.